Antes de decidirte por obtener una línea de crédito, es muy importante evaluar si en realidad es lo ideal para tu negocio.
Una línea de crédito es una forma de crédito rotativo, y esto significa que tu crédito es renovado automáticamente por el banco mientras pagas la deuda.
La línea de crédito es una excelente opción para invertir en tu negocio, mantener inventario, pagarle a tus empleados, y cubrir gastos de esa naturaleza que se presentan frecuentemente. En otras palabras, es como tener a un buen amigo al lado que te saca de problemas económicos de inmediato.
Obtener una línea de crédito es buena idea si necesitas una gran cantidad de dinero, a diferencia de las tarjetas de crédito cuyos límites usualmente son $20K. Con una línea de crédito puedes conseguir mucho más dinero para tu negocio.
Una línea de crédito te permite retirar hasta el 100% del crédito que tienes disponible gratuitamente, y también es ideal porque puedes pagar la deuda por el monto que te prestaron poco a poco.
En cambio las tarjetas de crédito usualmente solo te permiten retirar el 20% del crédito, y viene a un costo muy alto, y eso porque los intereses de las tarjetas de crédito se van acumulando si no saldas la deuda de una vez. Una línea de crédito te permite también elegir si decides devolver la totalidad del capital antes de tiempo, algo que tampoco puedes hacer con un préstamo comercial tradicional.