En algún momento tu negocio necesitará un préstamo si quiere crecer de forma rápida y efectiva. Pero antes que nada debes asesorarte sobre los diferentes préstamos a plazo para escoger el que más le conviene a tu negocio.
Las diferentes opciones son el préstamo a largo plazo, el de corto plazo y la línea de crédito.
Para determinar cuál es el préstamo que más te conviene, el primer paso es identificar cuál es el propósito del préstamo, o cuál es el fin que quieres alcanzar con ese dinero. Luego debes entender en qué posición económica se encuentra tu negocio en el momento y como está tu historial de crédito y el de tu negocio. Teniendo en cuenta estos elementos, tendrás mejor proyección para navegar tus opciones.
Si tienes necesidad de una cantidad de dinero grande como para comprar una propiedad, comprar maquinaria o hacer reconstruir tu negocio, puede ser que un préstamo a largo plazo sea lo ideal porque tendrás mucho más tiempo para devolverlo y un interés bastante bajo. Sin embargo, esto viene con un precio: necesitarás un historial de crédito excelente, mucha documentación tuya y de tu negocio, y también mucha paciencia, ya que aplicar para este tipo de préstamo puede ser un proceso largo y tedioso.
Si tu crédito es menos que excelente o no necesitas una gran cantidad de dinero, también hay otras opciones financieras.
El préstamo a corto plazo está diseñado para devolver el dinero en no más de 18 meses, y es asequible para personas con mal crédito.
La línea de crédito es una forma de crédito rotativo a la cual puedes recurrir cada vez que se te presente una emergencia. La línea de crédito es ideal para aliviar problemas en el flujo de fondos y te puede ayudar a cumplir con tus compromisos financieros todos los meses. Un beneficio de la línea de crédito es que lo puedes pagar en incrementos, como también puedes elegir la fecha que lo quieres devolver.
Elegir el préstamo correcto es difícil, y para eso estamos aquí. Contáctenos hoy para evaluar tu caso y guiarte en el camino correcto.
